La contaminación es uno de los principales problemas a los cuales nos vemos sometidos. Al momento que nos levantamos para darnos un baño, salir limpios a la oficina, universidad o a realizar nuestras gestiones creemos que así lo será, pero la realidad es otra.
Desde el momento que abrimos la puerta de nuestra casa la situación se vuelve tensa, el smoke de los vehículos, la eliminación de gases y sustancias tóxicas que arrojan las empresas, los desperdicios que han sido arrojados en las calles y mas situaciones que manchan los deseos de permanecer limpios para realizar nuestras labores diarias.
Cuando nos transportamos en los buses especialmente las mañanas las cosas son demasiado fuertes. Cuando tenemos suerte los buses están limpios, pero en otros, se puede observar a parte del smoke que botan la suciedad en los asientos, pasamanos, e incluso en las ventanas, las huellas de grasa de una cabeza sucia que se arrimo para ir durmiendo en el día anterior.
Pero a nivel importante y de alto impacto se da en las grandes empresas, que eliminan los desechos durante todo el día y toda la noche a los ríos, quebradas y a la atmósfera. Gran cantidad de estas empresas se protegen en un falso cuidado social aparentando estar preocupados por el mantenimiento de un parque, una vereda o un sitio determinado pero pequeño en la ciudad, mostrando la falsa máscara social, cuando saben que el daño que causan al no dar un tratamiento técnico y adecuado a la basura, debería ser la principal cosa en la que reflejen sus esfuerzos.
Y por otra parte nosotros, los individuos sociales que somos parte de la lista de la contaminación diaria que generamos, el votar los desperdicios en las calles, por la ventanas de los autos, el no sacar la basura en el horario apropiado, el no guardar los papeles inservibles que tomamos en la calle y votarlos en un basurero, sino que hacemos lo más fácil, arrugarlo e incluso hacerlo pelota y votarlo directamente en la calle.
Estos actos traen grandes consecuencias especialmente en tiempos de lluvia, se tapan las alcantarillas, los pasos a desnivel se inundan, el agua no corre con facilidad y más de uno son los afectados por un hueco o un bache en la vía que por esta razón no se lo puede distinguir.
Pero todo puede cambiar y no es necesario esperar que todo sea como una película de ciencia ficción en donde todo lo que pensamos se da por la mera tecnología, el cambio debe comenzar por uno, recuperando valores perdidos, respetándonos y respetando a los demás, al considerar que no pesa ni fastidia ser ordenados y sobre todo cultos, pensar que con un simple acto de votar la basura en su lugar a más de respetar con el tiempo va a evitar que se genere un problema.
